Y las primeras lágrimas brotan sin permiso al escuchar las primeras notas de una guitarra...
¡No! ¡Qué digo las primeras!, brotan todas a la vez, de golpe, ¡todas!, como una riada imparable, como un aluvión resbaloso. En un instante mis ojos son dos cascadas, dos algodones empapados que se vacían, se vuelven dos nubes en una tormenta.
Las lágrimas se abren camino entre los dedos y corren por mis manos que están pegadas a mi cara; resbalan por mi brazo, se cuelan dentro de mi vestido, y son lágrimas, no son estrellas. No sé si llegarán a ser estrellas, pero ahora son lágrimas que me roban mi coraza, que hacen surcos en la piedra, y no son de amor; son lágrimas del alma, las que curan y las que matan, las que llevan imágenes dentro de ellas y tienen vida por sí mismas, y se agolpan, se empujan las unas a las otras en mis ojos, ahora algodones.
Ya no hay marcha atrás, ya no podré parar hasta que la riada pare por sí misma, hasta que se sequen los ojos, o hasta que me quede sin alma.
¡Oh, lágrimas! ¡Qué traicioneras sois!
¡Oh, alma! ¿Por qué me vendes de esta manera?
¡Oh, mis ojos! ¿Cuándo vais a parar?
¡Oh, corazón! Por qué no te volverás de piedra también...
¡Lágrimas! ¡Venid todas a por mí!
¡Venid de una vez y para siempre!
¡Como un ejército implacable!
Como esta noche, clavando vuestras lanzas en mi corazón, asediando mis ojos.
Venid… Aquí os estoy esperando, os aniquilaré con esas mismas notas de guitarra y con mi voz, y tarde o temprano os convertiré en estrellas. Tarde o temprano, si lloro, lo haré por vosotras, porque os habré vencido.
Esta noche la propia alma pesa más que la piedra. Esta noche no puedo volar, mis saladas agresores me roban la visibilidad. No volaré. Miraré desde las alturas los cálidos hogares con las ventanas encendidas, me colaré con mi imaginación en la intimidad de ellos y fantasearé con la futura luz de las mías.
(De "Crónicas de La Gárgola almada")
Saludos con el viento.
15 comentarios:
Ah, qué maravilla, María, qué maravilla. Seguro que serán las estrellas, seguro.
Muchísimas gracias Amando. Es uno de los capítulos de mi libro y uno de los pasos en la evolución de su personaje. No se debería contar el final pero... Sí, las convirtió en estrellas.
Un abrazo.
"Lagrimas del alma", lo resume todo, así es.
¿Sabes lo viva que ha de estar un alma para sentir y expresarse así? Mucho, claro. Yo creo que sí son estrellas porque en última instancia, sólo las almas que no son de piedra pueden sentir de esa manera. Claro, también hay lágrimas de gozo y alegría. En resumen, estamos vivos y nevegamos...Avanti!!!
Un beso
Pues sí, Valaf, al final siempre se trata de eso, de seguir vivo y tirar para adelante. Gracias.
Besos.
Querida María:
Como las estrellas que vemos de noche emitieron su luz hace mucho tiempo, el poeta sigue deslumbrándonos con ideas en la que ya no cree, con una manera de ser y de ver el mundo que ya no es la suya. ¿ Notan los demás lo que él siente ? La inadecuación, el desajuste entre lo que un día escribió y lo que ahora es. Pero nadie sospecha la muerte de una estrella a la que seguimos viendo esplender cada noche...
Un abrazo.
Querido Conocimiento:
Siempre apuntas algún matiz o idea que va un poco más allá.
En efecto, es un error en el que suele caer mucha gente al leer una entrada (ya sea en verso o no): creer que todo es en tiempo real o, si no lo es, creer que todo es real.
El poeta puede haber escrito en el pasado algo que ya no cree, pero también algo que ya no siente, aunque por ello no deja de ser auténtico.
El poeta puede escribir algo que no ha sentido o vivido nunca, únicamente por desafiarse a sí mismo.
Un abrazo fuerte.
Me ha gustado mucho este fragmento de prosa poética. Aunque no lo hubieras acompañado de la imagen de una mujer llorando, me parecía sentir una mujer llorando.
Un abrazo y besos
Es agradable comprobar que se transmite con las palabras, es el objetivo de aquellos a los que nos gusta escribir.
Gracias por comentar.
Un abrazo.
LAGRIMAS
MARÍA, las hay de añoranza, alegría,pena, dolor.
Las tuyas me suenan más a las primeras, pues brotan al escuchar la guitarra.
Todas, te dejan luego el alma serena y limpia.
Muy bonita poesía.
Saludos, manolo
marinosinbarco.blogspot.com
Gracias Manolo. Realmente no es una poesía, es un capítulo de mi libro de relatos "Crónicas de La Gárgola Almada". Me alegro de que te inspire serenidad, aunque a esas alturas del libro el personaje aún no la tiene.
Un abrazo.
¡Hola!
Un texto increible, dan ganas de llorar, para sentir esas lágrimas resbalando entre los dedos, cataratas huyendo hacia la infinita dejadez.
Saludos de J.M. Ojeda
Buen fin de semana.
Muchas gracias J.M., me alegro de que te guste.
Un buen fin de semana para ti también.
Saludos cordiales.
Por aquí me daba una vuelta, y me dije: "voy a saludar a María" :-)
Je, je... Siempre eres bienvenido Luis.
Un cordial saludo.
Bufff, realmente me estremece, besos.
Publicar un comentario