Me encuentro tumbada bocarriba observando mis pies. Están juntos, como si fuese un cadáver al que solo le falta la etiqueta colgada del dedo gordo. Llevo las uñas pintadas de gris plata; si muriese ahora, no me gustaría hacerlo con ese color en ellas. ¿Lo sabrías y me las pintarías de rojo? o de blanco nacarado, como el día de nuestra boda. Sí, mejor blanco nacarado. No me dejes ir con las uñas pintadas de gris.
Saludos con el viento.
10 comentarios:
Me sigue admirando tu capacidad de volar más allá de lo aparente y describirnos lo que se ve desde donde no todos logramos llegar. Felicidades y sigue creando.
Te lo agradezco y me alegro de poder ayudar a "viajar"...
Haré lo que pueda siempre que la vida y mi cabeza me lo permitan; de momento, no puedo evitarlo.
¿Y si las pintara del color del viento?
Esa idea, de tan bella, merece un poema. Prometo trabajar en ello. Gracias Amando.
Un abrazo.
mejor de rojo.
Puede ser...
"...no es vacua la espera,
puede ser el preludio de lo inmenso".
Una vela encendida en la tormenta
la sensacion de que en cualquier momento
el instante florezca en milagro..
Saludos.
Es la espera del poeta.
Saludos.
La paciencia y el sentido del humor... dos cualidades con las que la poesía suele portarse muy bien.
Un abrazo.
Pues sí, y hay que darle rienda suelta a la mano.
Bienvenido.
Un abrazo.
Publicar un comentario